Que el (colorido) diseño brasileño pase por un excelente momento de forma se debe en gran parte (por supuesto) a los hermanos Campana. Los afamados paulistas marcaron la senda de por dónde ir y unos cuantos son los que han ido siguiéndola.
Mauricio Arruda es, a mi parecer, uno de los creativos brasileños con más recorrido por delante. Él es arquitecto y urbanista, participó en los procesos de elaboración de la Agenda 21 para la Construcción Sostenible en América Latina y desde entonces, desarrolla su investigación en temas relacionados con el medio ambiente, el diseño y la arquitectura.
La
línea José es una familia de muebles de almacenaje que desarrolla ese lenguaje informal, simple y funcional tan celebrado en el diseño brasileño. Mauricio argumenta que se inspiró en los mercados callejeros de frutas y verduras, adaptando las cajas de plástico a su uso en el interior de una vivienda.
Si hablamos de estrategias de ecodiseño, Mauricio no sólo ha prolongado la vida útil de estas cajas de plástico, sino que ha tenido en cuenta todo el ciclo de vida del producto, disminuyendo el derroche de energía y materiales en su proceso de producción y utilizando maderas con el sello de garantía FSC con acabados no dañinos para el medio ambiente.
o:
El frutero de Curro o
Diseño cartonero o
Shubladen